La pasta choux es una preparación de masa típica francesa de algunos pasteles, que se caracteriza por tener una masa muy ligera. Se suele comer fría y a menudo rellena con otros ingredientes que pueden ser dulces o salados.
La pasta choux que es la masa con la que podremos preparar profiteroles, lionesas y otros dulces como los “petisus”.
Ingredientes:
500 c.c de agua
300 gr de harina
150 gr de mantequilla de vaca cortada en trozos
7 huevos XL
Media cucharadita de sal
Media cucharadita de azúcar
Elaboración:
En una cazuela, ponemos la mantequilla, la sal, el azúcar y el agua, calentamos todo el conjunto hasta que entre en hervor y la mantequilla se haya derretido completamente. Añadimos la harina de golpe y removemos enérgicamente con una cuchara de madera hasta que veamos que se ha formado una masa homogénea y que se desprende fácilmente de las paredes de la cuzuela.
La apartamos del fuego y removemos la masa un par de minutos más antes de dejarla entibiar. Añadimos un huevo y mezclamos hasta que veamos que se ha integrado en la masa y repetimos la misma operación hasta que añadas todos los huevos y obtengamos una masa consistente y pegajosa.
Precalentamos el horno a 200º C y cubrimos el fondo de una bandeja de horno con papel parafinado. Ponemos la masa en una manga pastelera con una boquilla lisa y comenzamos a hacer pequeñas bolas sobre el papel parafinado, debemos dejar una separación entre las bolas de unos tres centímetros, ya que al hornearlas crecerán.
Horneamos unos 25 minutos o hasta que veamos que las pastas quedan doradas y huecas. Procurad no abrir el horno, corremos el riesgo de que se aplasten y no obtengamos el resultado esperado. Pasado este tiempo, apagamos el horno y lo abrimos a medias, dejando reposar unos 10 minutos para que queden bien secas.
Ya solo queda preparar un buen relleno, pero esa es ya otra receta…